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Cinco tips para hacer Homeschool en Tiempos de Crisis


Amigas, estoy con ustedes. Esto sí que no lo vi venir, pero creo firmemente que la gracia de Dios está en todo.

Confío en que este tiempo de encierro traerá abundantes frutos espirituales para muchos de nosotros esta Cuaresma.

En casa, por ejemplo, hemos estado rezando los cuatro juntos el Rosario o a la Coronilla de la Divina Misericordia. Me decía mi esposo el otro día: “pocas veces lo habíamos hecho los cuatro juntos”.

Creo que a través del reto del Coronavirus, Dios está tocando a cada familia, a cada persona de una forma especial.

Aunque nos cueste adaptarnos, tengo fe de que en unos meses más habrá muchos testimonios hermosos de nuevas vidas en Cristo, porque Él siempre obtiene lo mejor de las situaciones más retadoras. No dice en Jeremías 29:11:

<<Porque yo sé muy bien lo que haré por ustedes; les quiero dar paz y no desgracia y un porvenir lleno de esperanza>>

Así es Nuestro Dios: Puro Amor y Misericordia. ¡Oremos y confiemos! Esto también pasará.

Pero mientras eso sucede, quiero compartirte hoy, especialmente si no eres Mamá Homeschooler y ahora te ves en este nuevo rol, cinco puntos a considerar para hacer de este tiempo con los niños 24/7 provechoso y lo más disfrutable posible para todos. No tengas miedo, you can do it! :)

1. Oración: Sé que debes estar preocupada por que tus hijos “no se queden atrás” en cuestión académica en la escuela. Personalmente, más que eso, creo que es tiempo de crecer como familia en la vida espiritual, en la vida de oración. Empiecen el día con una meditación del Evangelio, léeles, y pídeles que cierren sus ojitos y cuando los abran, invítalos a compartir qué pasó por su mente, qué les dijo Jesús en su corazón. Hagan el ofrecimiento del día y ahora sí. ¡A iniciar! Agrega pequeños espacios de oración para ti y para ellos conforme se vaya dando el día. Para nosotros ha sido básica la oración de la mañana, de media tarde y como siempre, la de antes de dormir. También hemos estado haciendo el Ave María de cada vez que nos lavamos las manos y procurando vivir la Santa Misa y Adoración Eucarística online, aunque sea unos minutos. ¡Qué gran bendición con los medios electrónicos! ¡Jesús y María están en todo!

2. Tiempo para hacer lo que les gusta antes de empezar a trabajar: Tal vez su escuela/colegio les envió por email tareas que hacer o proyectos online, lo cual está muy bien. Pero te aconsejo no saltar al trabajo académico sin darles a los niños un pequeño espacio para hacer lo que les gusta (leer un ratito, hacer origami, como en nuestro caso, colorear, hacer una manualidad, cantar, etc). Es a penas mi segundo año de homeschool, pero esto me ha dado excelente resultados para lograr mayor cooperación durante el día ;)

3. Belleza: Todos estamos con la incertidumbre, en normal, de repente se nos junta el estrés, ¡hay que combatirlo! A mi hijita le gusta hacer ballet y como era de esperarse las clases se cancelaron hasta nuevo aviso. Desde hace tiempo le empezamos a poner videos de "El Cascanueces" o "El Lago de los Cisnes" y ahora a -casi- todos nos gusta verlos (mi hijo prefiere seguir con su origami ;). Hay que llenar los ojos y el corazón de belleza, siempre, pero mucho más en tiempos de crisis. La música también es de gran ayuda, bailar, tocar un instrumento musical. Ojo con los noticieros, programas, conversaciones y/o videos de youtube que los puedan asustar más. Los niños necesitan sentirse seguros en su hogar, no tenemos control de lo que pasa en el mundo, pero sí podemos esforzarnos por protegerlos y mantenerlos tranquilos bajo nuestro techo.

4. Ejercicio: Ha sido un reto para nosotros en estos primeros días porque... ¡acá todavía hace un poco de frío! Después de unos días de encierro las energías ya están más que acumuladas (¡Ups!). Nuestras opciones son usar un pequeño brincolín, bailar un rato o practicar Tae Kwon Do (en el caso de mi hijo). Si tu tienes la oportunidad de que jueguen libremente en el patio, dales su tiempo dos veces al día para hacerlo. Es básico despegarlos de los electrónicos y tener espacios de libertad, sin agenda, para aprender todos los días de la naturaleza.

5. No llenes TODO su día de actividades: Aquí yo todavía batallo un poco, porque a veces me entra la prisa de avanzar al mismo ritmo de siempre. Es importante que tengan sus momentos de juego libre porque, ahí también están aprendiendo. Parte de la belleza del "Homeschooling" es el "Unschooling", dejarles su tiempo para explorar juntos (o separados si ya están más grandecitos) los temas en los que tengan curiosidad, platicar sobre ellos, cocinar juntos... ¡te sorprenderás de todas las cosas hermosas que hay en sus cabecitas cuando les damos oportunidad de hablar sobre ellas!

Y finalmente, si tienes alguna otra duda sobre el tema, te invitamos a contactarnos por inbox o a unirte a nuestro grupo en FB "Un Café en El Árbol Menta". Somos una comunidad online de mujeres católicas que oramos, aprendemos y compartimos sobre nuestro día a día... creciendo juntas en la alegría y en la fe.

Nelly Sosa nació en Monterrey y es comunicadora, esposa y mamá católica homeschooler de dos niños que no dejan de sorprenderla todos los días. Su gozo por reencontrarse con Dios en un pequeño pueblo en Pennsylvania la inspiró a compartir sobre su camino de fe en El Árbol Menta. Cree firmemente que la Palabra de Dios, los Sacramentos y el apostolado cambiarán al mundo.

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