top of page

Para casarse no hay prisa: Cómo vivir la soltería feliz y confiada en Dios


Dicen los padres de la Iglesia que la paciencia es la virtud sobre la que el resto de los valores se fundamentan. Sin embargo, a nuestra sociedad posmoderna, que quiere todo “express”, “light” y “fast”, poco le importa saber de paciencia.

Queremos hacer todo rápido y con el mínimo esfuerzo posible...

Por eso se han popularizado las dietas que prometen milagros en pocos días y sin esfuerzo, o las apps que consiguen citas con sólo hacer un click.

La verdad es que no nos gusta esperar, nos dan miedo el silencio y la incertidumbre. No es de extrañar entonces, que también al intentar “encontrar el amor” nos gane la impaciencia y la desesperación.

Pero Dios nos llama a la confianza amorosa y a la paciencia humilde, sí, también en el proceso de discernimiento y preparación para el estado de vida que Él desea para nosotras.

Como mujeres católicas solteras, entendemos este proceso de “búsqueda del amor” como el camino para encontrar al compañero de vocación que Dios preparó para nosotras, desde antes de crear el mundo.

Por eso, al ver el matrimonio como una vocación, como un llamado a la santidad, deberíamos confiar en que el proceso de preparación al matrimonio (aún sin haber encontrado a nuestro compañero de vida) es tan importante como el matrimonio en sí.

Porque, sería imposible pensar que todas las virtudes que necesitamos serán desarrolladas en nosotras de forma instantánea -al conocer a quien habrá de ser nuestro compañero-.

Por eso es importante preparar nuestro corazón en este tiempo de soltería.

Hay 3 elementos que creo que nos pueden ayudar a, como expresa el profeta Miqueas (6:8), “caminar humildemente con nuestro Dios”, cuando estamos solteras:

1.- La oración. Organiza tu día de modo que el centro sea la oración y la Misa. Date tiempo de rezar el Rosario, o las Laudes, o de practicar la oración de contemplación o meditación que recomienda San Ignacio de Loyola.

A través de la oración podemos escuchar mejor la voz de Dios que nos “hablará al corazon” (como expresa el profeta Oseas) y nos dará luz de cuál es nuestra vocación (por principio de cuentas), pues dentro del maravilloso plan de Dios puede estar la vida consagrada para nosotras, ya sea de forma comunitaria o individual.

Haz que este tiempo de soltería sea propicio para escuchar la voz de Dios y conocerle y amarle mejor.

2.- Escribe. Una práctica bastante recurrente de algunas chicas es escribir cartas a su futuro esposo (aún sin conocerlo) para compartirle sus sueños, esperanzas y luchas.

Algunas chicas (y chicos) se regalan estas cartas el día de su boda a modo de expresar: “te amaba y rezaba por ti desde antes de conocerte”. Si te parece muy cursi, puedes escribir simplemente para ti, haciendo el esfuerzo diario de reflexionar “en dónde estuvo especialmente Dios presente en mi día”. De esta manera podrás ver cuál es la voluntad de Él para ti (dicen los maestros espirituales que estamos llamados a hacer “lo que nos da vida en abundancia y donde damos vida en abundancia).

Al hacer el esfuerzo diario de reflexionar y escribir al respecto, podremos tener una idea más clara del llamado de Dios para nosotras.

3.- Involúcrate. Haz voluntariado, entra a un grupo de la Iglesia, inscríbete a cursos académicos o prácticos de acuerdo a tus intereses (cocina, baile, deporte, etc.) Además de que esto te ayudará a mantenerte activa y feliz, conocerás gente que… quién sabe, tal vez podrían acercarte a tu compañero de vida ;)

Que este tiempo de soltería no sea un tiempo que vivamos pensando “en el futuro” (preocupadas porque aún no estamos o casadas o dentro de la vida religiosa) sino que sea un tiempo precioso de vivir en el presente: entregándonos completamente a Dios y a los demás.

Tengamos la certeza de que Él abrirá caminos, obrará milagros, si es preciso, para ayudarnos a encontrar dónde, cómo y con quién tendremos “nuestra vida en plenitud”.

Tere Ávila es profesora de preparatoria y colaboradora en varias asociaciones de impacto educativo y misionero. Actualmente cursa la Maestría en Teología en Boston College.

Conoce a nuestro Equipo
Untitled.png

Somos una comunidad de

Mujeres Católicas en diferentes etapas de la vida.

  • Watercolour-Instagram
  • Watercolour-Facebook
bottom of page